Recortes en sanidad

Hola!

Os paso el trabajo de un equipo que, realmente, merece ser difundido. De lo mejorcito que he visto últimamente en la red… .

Texto de Manuel Talaya y Gabriel González: 

Hacía tiempo ya que teníamos en mente esta sesión, con la idea clara de cual tenía que ser el escenario y una base sobre lo que queríamos que fuera la historia.

Respecto al escenario, en cuanto decidimos fechas, nos pusimos a ello: queríamos hacerlo en la enfermería de la plaza de toros de Tarazona de la Mancha, que ya sin «decorar» tiene un ambiente bastante apropiado para el estilo, con un mobiliario muy…digamos antiguo….una camilla de hierro con engranajes y palancas, focos (de los cuales el portátil tuvimos que repararlo un poco y el grande de techo no nos entraba en el encuadre bien y decidimos obviarlo) y mesas de cristal y metal a juego…en fin, unas auténticas reliquias y una gozada  (siempre que no vayas a usarla para operar de verdad, claro.).

En este punto, agradecer al alcalde de Tarazona, que no sólo no nos puso problemas para realizar la sesión y dejarnos acceso a la plaza durante dos fines de semana (uno para pruebas y otro para la sesión en sí), sino que además nos prestó el maletin de «herramientas» que se puede ver en las imágenes (no preguntamos mucho sobre la procedencia del mismo, pero fijo que más de un hueso ha cortado esa sierra).

La sesión la empezamos temprano, a las 8.30 ya estábamos Fran y Manuel con la ambientación y Gabriel con la iluminación, el tema del escenario fue bastante fluido porque ya habíamos estado en el sitio y teníamos la idea bastante clara de como colocar las cosas, asique enseguida estaba el negatoscopio en su sitio, las sierras, tijeras y demás, distribuidas en las mesas, los sueros…en fin….ya casi podíamos operar….en este punto se nos ocurrió que un cerebro en una bandeja iría muy bien al decorado, asique….allá que fuimos, y después de recorrer todas las carnicerías del pueblo, al final encontramos el cerebro de un cordero que nos aguantó casi casi toda la sesión (hasta el momento que a las enfermeras les dio por diseccionarlo).

Como curiosidad decir, que entre los objetos hay varios de ellos que son «excentricidades» de Manuel y Fran, como el interior de una radio de transistores, una botella de Jaggermeister, o como le llaman ellos, el jarabe del diablo (que gracias a Dios ya llegó vacía…), y una figurilla de la «Santa Muerte».

Lo complicado vino a la hora del maquillaje, lo que en principio iba a ser un vestuario como de época, en plan Jack el destripador, después de la primera visita a la enfermería y de algunos debates, decidimos que entraba mejor algo tipo Silent Hill, por lo que nuestras actrices, Loly y Ana irían de enfermeras y Fran sería el blanco de sus cuchillos. Ana dirigió la parte de maquillaje, con la ayuda de Loly y Francisco Antonio que también echó un buen rato por allí repartiendo sangre y barro (nunca mejor dicho porque las chicas se rebozaron un poquito en la arena del coso…)  intentando hacer algo similar a las máscaras que lucen las enfermeras de dicho videojuego, y que fuera cómodo para ellas a la hora de respirar y que diera un aspecto parecido a lo que es el juego.

Con media máscara de carnaval y vendas hicieron esta especie de antifaces y a partir de ahí, empezó a brotar la sangre artificial, el latex, papel, y todos los recursos que se desplegaron para crear las heridas y los desgarros de piel que tan realista quedó (incluso procesando ha habido ratos de angustia).

Respecto a la parte técnica tuvo su complicación ya que las exposiciones debían ser cortas debido a que el negatoscopio quemaba las altas luces rápidamente. Después de varias pruebas decidimos iluminar con flashes. Además, este tipo de escena al estilo «gore» nos pedía un ambiente «rojizo»  que nos transmitía aún más si cabe una sensación más siniestra y agobiante.

Así que utilizamos varios flashes para el ambiente con gel rojo, otro flash también con gel rojo detrás de la puerta de cristal y para iluminar a los personajes utilizamos otro flash con 1/2 CTO con el fin de que las batas blancas y la camilla se vieran más o menos de su color. En el procesado hemos tenido que subexponer un poco las paredes y el suelo ya que el azulejo blanco reflejaba muchísimo la luz de los flashes.

En total (contando las obligatorias paradas de «avituallamiento») 12 horas de trabajo, una sesión larga pero divertida y con unos resultados que a nosotros nos gustan, con muchos momentos divertidos (tanto que muchas veces había que parar para que los actores se pusieran serios….lo cual no siempre conseguiamos), y deseando ya empezar con el siguiente proyecto!

 

Participantes:

Organización, Producción e Idea: Manuel Talaya y Fco. Javier Moreno.

Dirección Técnica y fotografías: Gabriel Glez.

Maquillaje: Ana Tébar

Personajes y vestuario:  Loli Haro, Ana Tébar y Francisco Javier Moreno,

Ayudante: Francisco Antonio Talaya

 

Más información y otros proyectos en: www.noctografia.com

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6 comentarios en “Recortes en sanidad”

  1. Gracias por vuestros comentarios. Sin duda ha sido una de las sesiones más largas que hemos realizado y aunque lo hacemos por placer, siempre se agradecen los comentarios positivos.
    Respecto a los recortes, aunque espero que no lleguemos a tanto como en las imágenes pienso que la sociedad no deberíamos permitir el sobrepasar ciertos límites. 😉
    Gracias de nuevo y un saludo,
    Gabriel

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